29/6/09

adios

Estoy regresando a mí. Pero más ligera.
Las maletas las dejé a la entrada del vagón. ¿Destino? el que sea, lejos de mí.
Van dentro todos los sueños de insomnio, las incontrolables lagrimas acidas, los puños apretados, la decepción y el arrepentimiento. Empaqué también las ilusiones muertas, junto al cansancio del corazón.
Así los aires de noche refrescan, así puedo explotar por dentro sin temor. Así camino a paso ligero, destellando porque me encontré la otra vez, y no pienso soltarme de nuevo.

1 comentario:

Chu dijo...

No te sueltes nunca! Ser libre significa ser dueño de uno mismo! Lo eres